Cada placa, esmaltada a mano, es un pequeño prodigio artesanal hecho en Italia que fascina por su profonda expresividad y verosimilitud. El ejemplo perfecto de cómo un objeto de metal puede convertirse en un vehículo de emoción. Made in Italy
Cada placa, esmaltada a mano, es un pequeño prodigio artesanal hecho en Italia que fascina por su profonda expresividad y verosimilitud. El ejemplo perfecto de cómo un objeto de metal puede convertirse en un vehículo de emoción. Made in Italy